Saturday, October 28, 2006

La dualidad de la elección

Ama, espera, busca, pendiente de uno, queriendo dar más.
Que sucede cuando el amor es así de disparejo, uno quiere, y ama, pero no llega al estadio de corresponder en los mismos terminos el sentimiento.

Y que sucede cuando de pronto aparece alguien más que de alguna u otra forma sabe que hay quimica, si somos reduccionistas, para poder empezar algo diferente.

¿Debemos voltear y renunciar? Hasta que punto podemos ser tolerantes con esa dualidad, debemos terminar lo bueno que tenemos y arriesgarnos a la novedad e incertidumbre?

Creo que la respuesta es obvia, todo depende de que esperamos.